Alex Saab: Rehén de Guerra del Gobierno estadounidense

Alex Saab, diplomático venezolano, Enviado Especial y empresario, se encuentra secuestrado desde hace tres años por el gobierno de Estados Unidos, porque en medio de la pandemia de la COVID-19 se atrevió a desafiar y enfrentar al gobierno estadounidense, transportando alimentos, combustibles y medicinas para nuestro pueblo.

Lo dijimos el 12 de junio de 2020 y lo reiteramos hoy: ¡Alex es inocente! Se encuentra ilegalmente detenido, no ha cometido delito alguno como pretende hacer ver el gobierno de Estados Unidos y sus aliados. Alex Saab, por su condición de diplomático, goza de inmunidad y el gobierno de Estados Unidos, en un hecho sin precedentes en la historia de la relaciones internacionales, violó flagrantemente todas las regulaciones y los derechos de una persona internacionalmente protegida, contraviniendo la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.

Es importante conocer la historia para entender porque el gobierno de Estados Unidos continúa atacando al Gobierno del presidente Nicolás Maduro. Recordemos que al conocerse la terrible enfermedad del Comandante Hugo Chávez, se puso en marcha todo un plan para afectar la economía venezolana y desestabilizar el gobierno; plan que se aceleró con su desaparición física y se potenció el 9 marzo de 2015, cuando el entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, firmó una orden ejecutiva en la que declara una «emergencia nacional» por la amenaza «inusual y extraordinaria» a la seguridad nacional y a la política exterior causada por la situación en Venezuela; ahí se comienzan a formalizar las medidas directas contra nuestra Patria.

Este tristemente célebre decreto Obama le dio el argumento legal a las siguientes administraciones de los presidentes Donald Trump y Joe Biden para promulgar Medidas Coercitivas Unilaterales contra nuestro pueblo, que hoy ya suman 930; intensificar el bloqueo económico contra Venezuela e intentar derrocar al presidente Nicolás Maduro. Fue el inicio de la persecución y acoso de todas aquellas empresas y empresarios que se atrevieran a trabajar con el Gobierno venezolano.

Es aquí donde el imperio norteamericano se ensaña contra Alex Saab, víctima de esas medidas y del bloqueo, como lo ha sido nuestro pueblo. El diplomático venezolano fue perseguido, ilegalmente detenido y secuestrado en Cabo Verde el 12 de junio 2020; su único “delito”, considerado así por el gobierno de EEUU, fue proveer de alimentos, combustibles y medicinas a nuestro pueblo.

Alex Saab es un rehén de esta guerra multiforme que el imperio norteamericano y sus aliados vienen desarrollando contra Venezuela. Y aunque el objetivo sigue siendo el mismo, hacerse de nuestras riquezas y recursos naturales como lo acaba de afirmar descaradamente el expresidente Donald Trump, la confrontación ya no es en campos de batallas y con armas convencionales, ahora se utilizan nuevas armas, que van desde lo comunicacional, con el uso de las redes sociales, medios de comunicación tradicionales y digitales para divulgar y posicionar sus mentiras, sin dejar de recurrir a sus viejas prácticas de financiamiento de golpes de Estado, magnicidios, robo de activos en el exterior, congelamiento de cuentas bancarias, confiscación de oro, hasta llegar al secuestro de diplomáticos, como sucedió con Alex Saab.

Alex sabía a lo que se enfrentaba, conocía los peligros de su patriótica acción y, sin embargo, asumió con valentía el riesgo de llevar alimentos y medicinas para el pueblo de Venezuela, sorteando las Medidas Coercitivas Unilaterales y el bloqueo económico contra nuestra Patria. Esta injusticia del gobierno estadounidense contra Alex Saab es también una agresión a nuestra soberanía y al pueblo venezolano.

El ataque y acoso han sido permanentes, es mucho lo que nos han hecho, a lo que hemos sido sometidos, pero el pueblo venezolano, guiado por el presidente Nicolás Maduro, fiel al legado del Comandante Chávez, heredero de las glorias del Libertador Simón Bolívar, se crece ante la adversidad, ha resistido y resistirá heroicamente esta embestida imperial, hasta alcanzar la victoria.

Defender a Alex es defender a Venezuela, durante estos años de guerra no convencional, de Medidas Coercitivas Unilaterales y bloqueo económico, hemos fortalecido nuestra conciencia y la determinación indeclinable de ser libres y soberanos; aprendimos que solo unidos podremos vencer, crecer como país y como sociedad, entendimos que aún en las peores circunstancias, el Gobierno Revolucionario de Venezuela y el Presidente Nicolás Maduro Moros, protegen y priorizan al ser humano en sus derechos sociales. Hoy más que nunca, le decimos al imperio y sus aliados: nosotros seguiremos resistiendo y seguiremos venciendo.

Al cumplirse tres años de su secuestro, exigimos ¡Libertad plena para Alex Saab!

*Embajadora de Venezuela en Argentina