El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Yván Gil, participó este miércoles en la reunión del Comité Ministerial del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal) sobre Palestina, en la cual reafirmó una vez más, en nombre del pueblo y del Gobierno de Venezuela, “nuestra histórica posición de principios en respaldo a la justa causa palestina”, a la vez que reiteró la denuncia sobre el genocidio que perpetra la potencia ocupante de Israel.
Desde Kampala, República de Uganda, donde se realizan los encuentros preparatorios de la XIX Cumbre del Mnoal, el alto diplomático enfatizó que “no nos cansaremos jamás de abogar por el derecho del hermano pueblo palestino a existir en su Estado libre, independiente y soberano, con Jerusalén oriental como su capital y las fronteras previas a 1967; ni tampoco de respaldar a todos y cada uno de los esfuerzos internacionales orientados hacia el logro de una paz justa, integral y duradera de la cuestión palestina”.
El Canciller coincidió con otros participantes en que la situación sobre el terreno solo continúa deteriorándose, lo cual es motivo de gran preocupación, especialmente ante la falta de un horizonte político claro y de las políticas y prácticas criminales que, de manera sistemática y deliberada, vienen siendo aplicadas por la potencia ocupante, no solo para prolongar el conflicto sino, incluso y más grave aún, para destruir la viabilidad de la solución de los dos Estados.
“Es evidente que la potencia ocupante no tiene intención alguna de poner fin, ni a la ocupación ni a su brutal agresión militar, y que sus políticas están orientadas, no solo a hacerse con el control total del territorio palestino ocupado sino también, y más grave aún, a exterminar el pueblo palestino”, a través de acciones claras de genocidio contra decenas de miles de inocentes, particularmente mujeres y niños, alertó el representante venezolano.
El ministro Gil aseveró que hoy no existe un lugar seguro en la Franja de Gaza, por cuanto los hospitales, las escuelas, los hogares, los almacenes de alimentos, los templos religiosos y los centros de refugiados, entre otros establecimientos, han sido todos blancos de los bombardeos indiscriminados por parte de las fuerzas israelíes. “La población civil vive un verdadero infierno sobre el terreno y la situación humanitaria es insostenible”, lamentó.
Destacó que urge alcanzar cuanto antes un cese al fuego, garantizar la adhesión a las normas del derecho internacional humanitario y avanzar hacia un necesario proceso de justicia y reparación, en tanto valoró positivamente las distintas iniciativas que han sido lanzadas hasta la fecha ante diversas instancias de la justicia internacional, incluyendo la histórica acción emprendida por Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia.
“Tenemos que insistir en que la barbarie de la que hoy somos testigos es el resultado del marco de la impunidad con el que Estados Unidos de América viene protegiendo al régimen israelí, incluso dentro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, lo que ha llevado a las autoridades israelíes, no solo a desafiar la legalidad internacional sino a creer que está por encima de la ley”, condenó el diplomático.
Además, manifestó la preocupación por el silencio de la Asesora Especial del Secretario General de la ONU para la Prevención del Genocidio sobre la situación en Palestina: “Su silencio está protegiendo a los autores del genocidio”.
En nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU, el Ministro propuso tres ámbitos muy concretos para abordar el grave asunto: primero, propiciar un cese de las hostilidades y garantizar el acceso de la asistencia humanitaria que son requeridas sobre el terreno para salvar vidas; segundo, adoptar medidas que garanticen la protección internacional al pueblo palestino y tercero, fomentar un horizonte político que conduzca, tanto a la realización de los dos Estados como el ingreso de Palestina como Estado miembro de pleno derecho ante las Naciones Unidas.