La primera ministra de Barbados, Mia Mottley, ratificó el apego de la nación caribeña al principio de la injerencia establecido en la Carta de Naciones Unidas, a la vez que planteó la imperiosa necesidad de que sean levantadas las ilegales sanciones contra países como Venezuela y Cuba.
Luego de sellar una declaración conjunta con el jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro, y de ser rubricados dos acuerdos de cooperación en el Palacio de Miraflores, ubicado en Caracas, Mottley afirmó que se deben crear oportunidades “para los negocios y comercio, para lo cual es necesario que se retiren las sanciones y el bloqueo contra Cuba y Venezuela”.
Las sanciones y el bloqueo “solo sirven para desestabilizar la civilización caribeña”, argumentó la primera ministra de Barbados.
Por otro lado, indicó que la declaración firmada este sábado “revela nuestra necesidad absoluta como miembros del hemisferio de trabajar juntos sobre las distintas crisis que ya se han anunciado, en especial, la inseguridad alimenticia y de agua. En temas que afectan a la población, para que no sean víctimas de la división digital”.
Enfatizó: “Lo último que requerimos hoy es que haya inestabilidad”, dijo al aludir a la Carta de Naciones Unidas que se sustenta en el principio de la no injerencia (…) Nosotros apoyamos ese principio”.
La declaración conjunta entre el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, y la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, tiene como finalidad establecer un compromiso formal para continuar el trabajo conjunto en diversas áreas de cooperación que reafirmen los lazos de solidaridad, hermandad y cooperación para el mayor beneficio de ambos pueblos.
Prensa Presidencial