Este miércoles 5 de julio, el embajador Hector Constant Rosales, representante permanente de la República Bolivariana de Venezuela ante la Organización de la Naciones Unidas (ONU) en Ginebra, cuestionó el informe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (DDHH), Volker Türk, sobre la situación de los DDHH en el país.
Esta declaración la realizó el representante venezolano, desde la ciudad de Ginebra en Suiza, en el marco de la 53º Sesión Ordinaria del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que se realiza del 19 de junio al 14 de julio, a propósito de la aplicación de la Resolución 51/29, adoptada sin el consentimiento de Venezuela, que dio mandato para la realización de este informe sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela.
Durante su intervención, el embajador Contant recordó el rechazo de Venezuela a esta Resolución, enfatizando además que el referido informe se tomó en cuenta «priorizando la vía de la confrontación en vez del diálogo y la cooperación, que han sido nuestra guía en la relación con la Oficina».
Asimismo, indicó que el Gobierno Bolivariano deplora lo hostil de la redacción con afirmaciones sin fundamento, no verificadas ni contrastadas con el Estado; favoreciendo la campaña mediática financiada contra Venezuela, por los grandes medios transnacionales de comunicación.
En relación con el tema laboral y sindical, cuestionó la preocupación manifestada en el informe, sobre estos temas que son competencia de la OIT, y que el gobierno venezolano viene trabajando en el marco de una agenda de cooperación, con iniciativas como el Foro de Diálogo Social recientemente emprendido junto a empresarios y sindicatos.
Recordó que el Alto Comisionado visitó el país a principios de este año, por invitación del Presidente Nicolás Maduro Moros, desarrollando su agenda con total libertad.
En este sentido, indicó que Venezuela lamenta que se insista, una vez más, en afirmar que la compleja situación económica vivida es anterior a la imposición de ilegales medidas coercitivas unilaterales (MCU) por parte de los Estados Unidos.
Precisó que estas medidas han propiciado la pérdida de 232 mil millones de dólares en los últimos nueve años, y que existen estrategias utilizadas para desestabilizar al Gobierno Bolivariano desde sus inicios.
El representante del Gobierno venezolano aprovechó el momento para alentar a la Oficina de la ONU, una vez más, a que establezca el abordaje de las MCU como prioridad en la agenda.
«El compromiso con los derechos humanos de Venezuela también se demuestra mediante el esfuerzo del Gobierno Bolivariano para garantizar el mayor bienestar posible de nuestro pueblo. Destinamos más del 77% del presupuesto a la inversión social, con netos resultados», enfatizó el diplomático.
Reiteró que Venezuela seguirá fortaleciendo la cooperación con la Oficina de Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Con esta instancia «hemos renovado por dos años una Carta de Entendimiento, bajo los principios del respeto a la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos, lo cual debería ser garantía suficiente para evitar los juicios de valor y las aseveraciones que patentan el penoso desequilibrio de su informe», dijo.
Finalmente, a propósito de los 212 años de la independencia de Venezuela citó: «Hoy como ayer, con el ejemplo de nuestros Libertadores y Libertadoras y empuñando las herramientas de la verdad y la razón, Venezuela seguirá construyendo su camino hacia la plena prosperidad».
