Lágrimas y aplausos fueron las expresiones de emoción y fraternidad que se sintieron en la Embajada de Venezuela en Trinidad y Tobago al finalizar la película “Azú, alma de princesa”, del destacado cineasta venezolano Luis Alberto Lamata.
“Azú, alma de princesa”, producida en 2013 por la Villa del Cine, fue la película seleccionada como parte del nuevo proyecto cultural de la Embajada de pasar una película venezolana el último viernes de cada mes, el cual ha sido sumamente exitoso.
“Además de ser una película de altísima categoría técnica y artística, hemos decidido pasar ‘Azú, alma de princesa’ en honor a nuestros ancestros africanos, ya que mayo es el mes de la afrovenezolanidad en nuestro país”, destacó el embajador Álvaro Sánchez Cordero en sus palabras de bienvenida.
El largometraje se sitúa en el año 1780, cuando un grupo de esclavizados huye en busca de un cumbe que les proporcionará paz y libertad, bajo la guía de Azú, recién llegada de África y a quien se le atribuyen misteriosos poderes ancestrales.
“Pienso que esta película es de altísima calidad y nos deja innumerables mensajes relacionados con nuestros orígenes, nuestra ancestralidad y quiénes somos hoy en día”, señaló Shabaka Kambon, director de la organización Caribbean Freedom Project, quien añadió que “esta película merece ser proyectada a lo largo de Trinidad y Tobago y debe ir acompañada de cine foros”.
La señora Aina Olukayode, quien es maestra de primaria en Trinidad y Tobago, agradeció a la Embajada por esta magnífica película: “Muchísimas gracias, las revelaciones y conexiones fueron para mí sumamente profundas y sanadoras”.
“Azú, alma de princesa” ha sido acreedora de premios nacionales e internacionales, como Mejor Montaje en el Festival de Cine Venezolano de Mérida en 2013 y Mejor Película de Ficción en el Festival de Cine Latino de Punta del Este, Uruguay, en 2014.
Embajada de Venezuela en Trinidad y Tobago