La voz de Venezuela ha retumbado en las cumbres iberoamericanas por la soberanía y la unión - MPPRE

La voz de Venezuela ha retumbado en las cumbres iberoamericanas por la soberanía y la unión

La voz de Venezuela en las cumbres iberoamericanas se ha caracterizado por alzarse en defensa de la soberanía de los pueblos y de la unión en la diversidad de cada una de las veintidós naciones que conforman este mecanismo de concertación política y de cooperación.

En la Sesión Plenaria de la X Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en la ciudad de Panamá, República de Panamá, el 18 de noviembre de 2000, el comandante Hugo Chávez destacó la lucha contra lo que denominó, en su intervención, una tendencia inercial frente a las ideas de la política y de la economía, escenario en cual “pretendemos muchas veces atacar sólo los efectos de un problema y a veces dejamos de mirar las causas y los efectos a veces son tan grandes que sólo podemos colocar pañitos calientes”.

Argumentaba que atacar los efectos sin mirar las causas, representaba un poco facilismo y atropello, así como “reformular nuestros modelos democráticos, darle mayores contenidos participativos, creo que por ahí pudiera estar la salida de la trampa en la que en países como Venezuela se convirtió la democracia meramente representativa”, dijo en esta cita que tuvo como lema “La Unidad Nuestra”.

En la cita internacional celebrada en Santo Domingo, República Dominicana, el 16 de noviembre de 2002, Hugo Chávez puso en relieve un cuestionamiento para la reflexión: ¿Cómo transcender el modelo de desigualdad que tenemos en paz, en democracia?, al responder que le correspondió a Venezuela descifrar la manera, siendo una corriente que viene empujando desde abajo y una corriente que no se va a poder callar.

Incluso, planteó que los cambios de modelo en paz eran imperiosos, porque de lo contrario – alertaba – este continente va ser sacudido de nuevo por la violencia, no hay otra alternativa que cambiar en paz, por eso las respuestas de cambio incluso el enfoque, de nuestras reuniones, de nuestras Cumbres.

En 2007, desde Santiago de Chile, el 9 de noviembre, Chávez subrayó la importancia de la transformación de las estructuras internacionales, porque solo así “transformando las estructuras internacionales (…) uniéndonos de verdad, uniéndonos sólo transformando estructuras nacionales cada quien con su ritmo”.

En 2011, desde Asunción, Paragua, Nicolás Maduro, para entonces canciller de la República Bolivariana de Venezuela alzó la voz de la diplomacia bolivariana de paz, colocando en el debate temas que hoy todavía gozan de plena vigencia, al enfatizar sobre la necesidad de un desarrollo social y económico pleno de los países, sin que el “centro de decisión y mando de las políticas a aplicar esté en nuestros propios países”.

Alertaba acerca de las guerras y acciones militares desarrolladas por grandes potencias como las de “Libia e Iraq tiene un solo objetivo, el petróleo, el control de los recursos energéticos”, por lo que compartió que el Estado venezolano se planteó desarrollar un poder que garantice la capacidad para el ejercicio de la soberanía y su defensa.

Sostenía que, en el debate, al surgir de las experiencias de la región, se podrían ir configurando desde las experiencias propias, la capacidad de respuestas que cada país y sociedad, de manera democrática, ha venido generando al calor de las luchas por la construcción de un nuevo Estado y una nueva sociedad.

La Vicepresidenta Ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez, participó de forma virtual en la edición XXVII Cumbre Iberoamericana, realizada en el Principado de Andorra, enfocando su discurso en los aportes del país que permitieron la recuperación económica de los pueblos de cara a la pandemia de COVID-19 y mostrando la lucha incansable de Venezuela por defender su soberanía.

Los países miembros son los 22 Estados de América y Europa, de lengua española y portuguesa: Andorra, Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, Uruguay y Venezuela.

Los observadores asociados son Bélgica, Corea, Filipinas, Francia, Haití, Italia, Japón, Marruecos y Países Bajos y los observadores Consultivos: ALADI, BID, CAF, CEPAL, FAO, FLACSO, OCDE, OECO, OIM, OIT, OPS, PMA, PNUD, PNUMA, SELA y la Unión Latina.

La Conferencia Iberoamericana y la Secretaría General Iberoamericana atravesó un proceso de renovación iniciado en la XXII Cumbre Iberoamericana celebrada en Cádiz en 2012, que supuso mejorar la organización de las Cumbres; identificar las prioridades del mecanismo en los campos: político, económico, social y cultural; renovar y visibilizar la Cooperación Iberoamericana.

Con base en lo anterior, a partir de la XXIV Cumbre Iberoamericana celebrada en diciembre de 2014 en Veracruz, México, se definió que las Cumbres se llevarían a cabo cada dos años.

Prensa Presidencial