El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Carlos Faría, recordó este jueves a las víctimas del atentado terrorista contra una aeronave de Cubana de Aviación, al cumplirse 46 años de la criminal acción impulsada por Estados Unidos.
A través de su cuenta en la red social Twitter, @Fariacrt, el Canciller venezolano fustigó el “la maldad y el odio que destila el imperio genocida», que «ordenó el abominable 𝗖𝗿𝗶𝗺𝗲𝗻 𝗱𝗲 𝗕𝗮𝗿𝗯𝗮𝗱𝗼𝘀, cercenando la vida de 73 personas y la alegría de sus familias, aún esa herida permanece abierta y Cuba exige Justicia”.
El 6 de octubre de 1976 ocurrió uno de los episodios más lamentables de la historia reciente de Cuba, como lo fue el atentado terrorista contra el vuelo CU-455 de la aerolínea Cubana de Aviación, que mató 73 personas, mientras sobrevolaba Barbados.
Este día se conmemora en Cuba el Día de las Víctimas del Terrorismo de Estado para recordar el crimen contra el avión, cuyos autores tenían probados vínculos con la estadounidense Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), con George Herbert Walker Bush como su director para el momento.
La aeronave fue detonada por dos bombas escondidas en el baño trasero del avión, que transportaba a la selección cubana juvenil de Esgrima, que regresaba a su país luego de su participación en el Campeonato Centroamericano y del Caribe que se desarrolló en Venezuela. Entre las 73 personas asesinadas se encontraban 57 cubanos, 11 guyaneses y cinco funcionarios culturales coreanos.
El mismo año del atentado, el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés), entregó un “Informe Secreto de Inteligencia”, titulado “Voladura del Avión de Cubana DC-8 cerca de Barbados, Indias Occidentales, 6 de octubre de 1976”, en el que revelaron que justo el día anterior otro cubano recomendado por la CIA al gobierno de Venezuela, Ricardo Morales, el cual tenía el cargo de comisario de la Sección de Contrainteligencia de la DISIP, comunicó que el 23 y 24 de septiembre se realizaron reuniones en un importante hotel de Caracas.
De acuerdo con Morales, ahí se “discutieron algunos planes relacionados con la voladura de un avión de Cubana”, identificando cómo responsables a los cubanos Luis Posada Carriles y Orlando Bosch Ávila, además de los venezolanos Hernán Ricardo y Freddy Lugo, responsables materiales.