El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza; el exsecretario general de la Unasur, Ernesto Samper; el embajador de Venezuela ante Bolivia, Alexander Yánez y el exrepresentante por Venezuela en la Secretaría General de la Unasur y cónsul en Quito, Pedro Sassone, compartieron este jueves sus reflexiones y consideraciones en torno a la posible reactivación de la Unión de Naciones Suramericanas, en el Foro Internacional telemático «Los pueblos de Suramérica retoman el camino de la Unasur».
En el segmento de cierre de la jornada de cuatro días, titulado «Una agenda estratégica para una nueva Unasur», el Canciller venezolano definió a la Unión como una organización de avanzada, «que toca los verdaderos problemas de nuestros pueblos y propone soluciones», y exaltó su estructura organizativa, que contempla consejos sectoriales en todas las áreas, configurando «un gobierno compartido y colectivo para nuestros 12 países».
Calificó como «absurda» la tesis de que la Unasur imponía una ideología, que alentó su desactivación, por cuanto las desiciones se toman por consenso, con diálogo y respeto. Afirmó que detrás de su «congelamiento» imperó un plan desarrollado por el Gobierno de Estados Unidos contra la integración regional, que también ha impactado a Petrocaribe, ALBA-TCP y, en menor medida, a la Celac.
El ministro Arreaza se mostró optimista en que es cuestión de tiempo para que la Unasur sea reactivada, por lo que instó a los gobiernos de la región a hacer un esfuerzo de diálogo para retomar el camino de la integración a través de este mecanismo.
«Creo que debe haber una agenda para la transición, pues la reactivación no es algo sencillo», propuso el jefe de la diplomacia venezolana.
El expresidente colombiano Ernesto Samper también expresó su optimismo en la pronta reactivación de la Unasur, motivado a hechos que se han suscitado recientemente, como la recuperación de la democracia en Bolivia y la votación masiva del pueblo chileno en favor de una nueva Constitución.
«No podremos salir adelante a la postpandemia si no hacemos un nuevo esfuerzo de integración. Nunca había sido tan importante la integración como en esta época», consideró el exsecretario general de la Unasur.
Enumeró tres elementos a considerar en la reactivación del bloque: Creación de valor, que se refiere a fortalecer las ventajas competitivas de la región; inclusión social: avanzar en la igualdad y reducción de las asimetrías, y construcción de ciudadanía, vinculado con la movilidad, identidad y recuperar el sentido de comunidad de países.
Samper anunció que la llama de la Unasur cuenta con una nueva oficina en la Casa de la Patria Grande, en Buenos Aires, Argentina, desde donde despachó Néstor Kirchner, su primer secretario general.
El embajador Alexander Yánez esbozó el contexto histórico bolivariano que muchos años después germinó en la Unasur y explicó que en América Latina ocurre una recomposición o redefinición por parte de los pueblos de su ciclo de conciencia o de protección social, que había sido truncado por actores externos, y que la Unasur jugaría un papel estelar en esta reconstrucción de la geopolítica popular en América del Sur.
Como introducción al debate, el cónsul Pedro Sassone apuntó que atendiendo una instrucción del presidente Nicolás Maduro se han desarrollado cerca de 55 conferencias telemáticas sobre la Unasur, que han girado sobre tres temas: Logros, Unasur en la geopolítica internacional y la experiencia de los movimientos sociales dentro de la organización.
