Venezuela condena violación de la Carta de la ONU

Este martes, durante una reunión del Comité Especial de la Carta de las Naciones Unidas, la República Bolivariana de Venezuela condenó “la práctica de algunos Estados miembros de la ONU que recurren constantemente a la amenaza o al uso de la fuerza contra otros Estados, en clara violación al artículo 2.4 de la Carta, como el que actualmente realiza el gobierno de los Estados Unidos contra nuestro país”. Así lo denunció el Embajador Alterno ante la ONU, Henry Suárez, quien subrayó que este tipo de acciones son un “claro ejemplo del desprecio a las normas del derecho internacional que pone en peligro la paz y seguridad regional”. En este sentido, el diplomático venezolano instó al cese inmediato de todas las agresiones criminales del gobierno de EEUU y su “coalición de aliados” en contra de los derechos humanos del pueblo de Venezuela y de su integridad territorial y económica. Al tiempo que, solicitó los buenos oficios del Comité  Especial y de los Estados Miembros  a sumar esfuerzos para que las normativas y principios de la Carta sean respetados por todas las partes, ya que constituye la garantía de la convivencia pacífica entre naciones, avanzar y lograr resultados que sirvan para el bien común de la comunidad internacional. “Venezuela no ha sido ni es una amenaza a la paz y seguridad ni regional ni internacional, ni mucho menos a la principal potencia mundial, pues en los más de doscientos años de vida republicana, no hemos invadido, ni derrocado gobiernos, ni bombardeado, ni establecido bases militares, ni cárceles clandestinas en ninguna parte del mundo. Al contrario, el pueblo venezolano es amigable y pacífico, y los retos que enfrentamos en la actualidad, han sido agudizados por la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, por parte de la administración estadounidense”, expresó.  Al culminar el discurso, el Embajador Suárez recordó a los presentes que Venezuela, siempre ha sido un fiel defensor de los propósitos y principios de la Carta de la ONU, y no representa ningún tipo de amenaza. “Seguiremos defendiendo y apoyando todos los esfuerzos de los países amantes de la paz y el respeto a la convivencia pacífica entre naciones para fortalecer el papel de la Carta y de esta Organización”.