Buenos días, a todos los participantes de este Foro Mundial de Inversiones que este año se refiere a Invertir en el Desarrollo Sustentable.
En el nombre del presidente Nicolás Maduro darmos un saludo muy especial a la Secretaria General de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo la señora, Rebeca Grynspan, poco tiempo en el cargo, pero intensa la agenda que ha venido desarrollando.
El título alusivo invertir para el desarrollo sostenible, quiero referirme a la Declaración de Johannesburgo de 2002, cuando definía el desarrollo sostenible como el proceso mediante el cual, cito textual,“se satisfacen las necesidades económicas, sociales, de diversidad cultural y de un medio ambiente sano de la
actual generación, sin poner en riesgo la satisfacción de las mismas para las generaciones futuras”.
Esto nos lleva a la reflexión. La inversión en el mundo no ha garantizado, ni ha favorecido el desarrollo sostenible. En distintas áreas vemos los desequilibrios ha servido para acrecentar la concentración de los grandes capitales, cuando vemos la lucha contra la pobreza, la inequidad y la desigualdad.
La pandemia nos ha dejado 114 millones de personas que han perdido sus puestos de trabajo han pasado al desempleo y 120 millones de personas han caído en pobreza extrema, quiere decir, que los más pobres se han hecho más pobres y que la desigualdad, como lo hemos siempre ha denunciado en todos los espacios internacionales se han incrementado, donde una muy minúscula minoría posee la riqueza de las mayorías del mundo.
Se proyecta, por otro lado, que el cumplimiento de los objetivos del desarrollo sostenible se puede retrasar una década, mientras los mercados bursátiles en los Estados Unidos Norteamérica, alcanzaron niveles récord durante el año 2020. Mientras la humanidad entera estaba siendo afectada por la pandemia de forma inclemente, los mercados bursátiles estadounidense tuvieron un crecimiento mínimo del 40%.
Bueno, 2 millones 700 mil niños mueren al año por causa de desnutrición, en el caso de algunas vacunas, dos de las principales desarrolladoras de las vacunas acumularon un rendimiento de más del 300% en lo que va del 2021 en la bolsa, quiere decir al toque los grandes capitales han incrementado su expansión y su crecimiento.
Cinco fondos de inversiones los más grandes del mundo son los poseedores de la vacuna y el gran desarrollo y expansión del capital justamente ha sido en esta área, mientras millones de millones de personas han pasado a la pobreza extrema.
Incluso los mecanismos establecidos para combatir y controlar la pandemia, así como su efecto han demostrado el mismo modelo de desigualdad e inequidad.
Venezuela reiterado la denuncia se ha sumado a la Organización Mundial de la Salud, donde 10 países han concentrado más del 73% de las vacunas, marcando una clara tendencia a la desigualdad en el acceso en las vacunas.
Venezuela también ha reiterado el llamado para corregir la injusta distribución de los derechos especiales de giro emitidos por el Fondo Monetario Internacional, 650 millones de dólares se destinaron para revertir y apaciguar aminorar los efectos de la pandemia, pero más del 63% de estos recursos están dirigidos a los países ricos y vacunados.
En el caso de nuestro continente el 63% de estos derechos especiales de giro están dirigidos y destinados a los Estados Unidos de Norteamérica.
También Venezuela ha denunciado y seguirá denunciando en todos los espacios posible que hemos sido víctima de discriminación por parte de la asignación de estos derechos especiales de giro donde se le niega a nuestro pueblo disponer de 5 mil millones de dólares asignados a nuestro país.
La razón el veto del gobierno de los Estados Unidos, que además de imponer un criminal bloqueo ilegítimo contra Venezuela, evita por todos los medios que Venezuela pueda acceder a vacunas, a medicamentos y más recientemente a los derechos especiales de giro.
Otro gran desequilibrio que tiene que llevar los profundamente a la reflexión, si queremos como especie humana seguir proyectándonos en el futuro, tiene que ver con el cambio climático.
Dicen cifras especializadas, fuentes especializadas, si no tomamos medidas para mediados de este siglo habrá más plástico que peces en el mar, para mediados de qué siglo habrá más plástico que peces en el mar.
El Secretario General de las Naciones Unidas Antonio Guterres ha dicho que solo el 2% de los presupuestos públicos se destina la investigación en ciencias oceánicas, mientras grandes empresarios el mundo destina billones y billones de dólares a la investigación del espacio, quiere decir esto, que la inversión debe tener una direccionalidad equilibrada.
Es llamado de Venezuela la inversión para el desarrollo verdadero de los pueblos, desarrollo sostenible, sustentable si tomamos, por ejemplo, el caso América latina y el Caribe.
Según las estadísticas del banco de Basilea, los depósitos líquidos de América Latina y el Caribe en otras regiones del mundo, ascienden a 570 mil 200 millones de dólares, es muchísimo más, porque muchas veces están mascaradas empresas de latinoamericanos y caribeños registrados en otros países del mundo que luego son depositados en una jurisdicción distinta, no bajó la nacionalidad originaria de América Latina y el Caribe, sino de terceros países.
Está enmascarado ese número, pero este número representa, la emisión del Fondo Monetario Internacional es apenas el 9% de estos depósitos líquidos que tiene América Latina y el Caribe fuera de nuestra región en otra parte del mundo.
Si nosotros destináramos esos sus recursos a la inversión en los mecanismos regionales de desarrollo, sin duda alguna, tendríamos un impacto en la lucha contra la pobreza contra la desigualdad y contra la inequidad.
Se trata de corregir estos mecanismos, se trata de reforzar el multilateralismo para corregir las asimetrías financieras que se dan actualmente en los mecanismos internacionales.
Venezuela seguirá sin duda abogando por una nueva arquitectura financiera multilateral y lo decimos ahora desde país víctima de medidas coercitivas unilaterales, ilícitas y legítima, donde más de 450 medidas coercitivas unilaterales se han servido contra el pueblo de Venezuela y contra nuestra economía.
Necesitamos más multilateralismo, necesitamos más cooperación para verdaderamente garantizar una inversión, dirigida al desarrollo de los pueblos dirigido el desarrollo sostenible, tal como está contemplado, en la declaración de Johannesburgo del año 2002, y no para acrecentar los grandes capitales, no para expandir los grandes capitales, donde solamente estaríamos tomando y reforzando el camino de la desigualdad y de la inequidad.
Muchísimas gracias.