La República Bolivariana de Venezuela, se une al júbilo del Gobierno y del valeroso pueblo de la hermana República de Nicaragua en ocasión de celebrarse, este 14 de septiembre, el 165° Aniversario de la Batalla de San Jacinto, que no solo significó la victoria en la defensa de la soberanía nicaragüense sino que marca un hito histórico en la conciencia regional de la libertad centroamericana, frente a las pretensiones de invasión de los filibusteros estadounidenses.
Honor y gloria a los insignes combatientes como el General José Dolores Estrada, los Capitanes Carlos Alegría y Bartolo Sandoval, Teniente Coronel Patricio Centeno, el Centinela Faustino Salmerón y a los componentes de las cuatro compañías de patriotas entre ellos unos 60 flecheros indígenas yucul que se formaron para detener a los mercenarios del norte que en complicidad con el ansioso expansionismos del imperio estadounidense pretendían hacer de Centroamérica un reservorio de esclavos. Con justo reconocimiento las palabras del General Estrada, recogen la gallardía de los patriotas nicaragüenses «tal vez estuviéramos escribiendo una derrota, si el Teniente Eva, Vélez y Solís con Manuel Marenco no se resuelven a morir primero que abandonar el punto de donde les hacían resistencia”.
Honramos en este glorioso episodio de la historia latinoamericana, a la memoria del héroe nacional nicaragüense al Sargento Primero Andrés Castro que con piedras derribo a dos de los más importantes jefes enemigos y desmoralizó a las filas invasoras.
Cuánta! Dignidad cuánta hidalguía de aquél diezmado ejército patriota, que a pesar de estar en inferioridad de tropas y armas, sus eficaces estrategias e ingeniosas tácticas no solo legaron el triunfo militar sino que enviaron un contundente mensaje sin vacilaciones, al enemigo norteño de la irrenunciable soberanía de los nativos centroamericanos sobre sus territorios nacionales.
Saludamos al Comandante Presidente Daniel Ortega, a la Vicepresidenta, Compañera Rosario Murillo, y al Frente Sandinista de Liberación Nacional en cuyos hombros descansa hoy, la histórica responsabilidad de ser protagonistas al frente de una nueva epopeya antifilibustera, con sus renovadas formas de sometimiento como lo son la aplicación de medidas coercitivas unilaterales sobre los pueblos dignos latinoamericanos y caribeños, pero estamos convencidos que también, en estos tiempos, el ardor patriótico nicaragüense reinventará habilidades y tácticas para alzarse sobre la superioridad de armas del Ejército enemigo.
Con el espíritu de los grandes, Bolívar y Sandino, seguimos hermanados en una sola nación, un sólo pueblo en la defensa de nuestra soberanía y derecho a la libre determinación y ratificamos la voluntad política del Gobierno Bolivariano de sumar esfuerzos en la construcción de la Gran Patria Latinoamericana y Caribeña, que redunde en un mundo nuevo, más digno, justo y humano para todos.
¡Viva Nicaragua Bendita y Siempre Libre!
Caracas, 14 de septiembre del 2021