Culminó la campaña electoral para las elecciones regionales y municipales en Venezuela, a realizarse el venidero domingo 21 de noviembre. A partir de la medianoche de hoy jueves, en el país comienza la veda electoral, en la que los candidatos no podrán realizar o participar en actividades proselitistas, según lo estipulado en la Ley Orgánica de Procesos Electorales.
La campaña comenzó el pasado 28 de octubre con la participación de más de 70.000 candidatos que compiten por 3.082 cargos de elección popular, distribuidos en 23 gobernaciones, 335 alcaldías, 253 puestos de legisladores estadales y 2.471 concejales.
Un total de 87 partidos políticos, entre nacionales, regionales e indígenas, cerraron la campaña con actos efectuados en cada uno de los municipios y estados del país.
Los partidos que integran el Gran Polo Patriótico lo hicieron este jueves, al igual que algunos factores de oposición; otras toldas opositoras cerraron entre el lunes y miércoles.
Las actividades de los candidatos y candidatas transcurrieron en paz y en completa calma. El presidente del CNE, Pedro Calzadilla, informó que desde el inicio de la campaña electoral, “podemos decir que no ha habido ningún incidente”.
El cierre de la campaña coincidió este jueves con la instalación en Caracas por parte del Poder Electoral del plan de veeduría internacional, compuesta por delegados provenientes de África, América Latina y el Caribe, Asia y Europa. Entre las delegaciones que presenciarán estos comicios se encuentran integrantes de organismos electorales, asociaciones de profesionales, académicos, intelectuales y movimientos de solidaridad y defensa de los Derechos Humanos.
Calzadilla invitó a los veedores internacionales a constatar en la calle las condiciones de estabilidad política y libertad plena que tienen los candidatos para disputar cargos de elección pública.
Para los comicios del venidero domingo, los vigésimos novenos en 22 años, están habilitados 21.159.846 electores para ejercer su derecho al voto en más de 14 mil centros de elección y 30 mil mesas de sufragio, en medio del cumplimiento de normas de bioseguridad como el uso del tapabocas y la desinfección previa de los centros de votación.