La fiesta, noche o víspera de San Juan que se celebra cada 24 de junio con ritos y tradiciones ancestrales en honor a San Juan Bautista, ha llegado a Hanói, capital de la República Socialista de Vietnam de la mano de la Sección Cultural de la Embajada de Venezuela para acrecentar el intercambio cultural entre ambos pueblos.
Esta celebración encontró asidero en tierras venezolanas y desde tiempos remotos ha movido a pueblos enteros alrededor del santo purificador, San Juan Bautista, que sumado a la magia de las antiguas fiestas paganas que se organizaban con la llegada del solsticio de verano el 21 de junio, ha dado paso a todo un movimiento cultural de extenso repertorio.
Como parte de la celebración, en la sede de la Misión Diplomática de Venezuela en Vietnam se levantó un colorido altar, con flores y banderas en honor a San Juan Bautista, se escucharon sirenas y repiques de tambor pidiendo al Santo Purificador, que libre al mundo de la pandemia del coronavirus y no siga cobrando más vidas.
La embajadora Tatiana Pugh Moreno explicó que este Santo goza de amplia popularidad en la tradición cristiana, y capitaliza las celebraciones que giran en torno al día más largo del año, el 21 de junio, fecha que marca además la culminación de un ciclo de cosecha y anuncia cambios climáticos.
Este día los hacendados y las autoridades civiles y eclesiásticas daban una tregua a los esclavos negros para que tocaran sus tambores, entonaran sus cantos y bailaran bajo la figura de San Juan, sin prever que se gestaría una de las más importantes tradiciones afrovenezolanas, reseño la Jefe de Misión.
El repertorio musical de evidente raíz africana, abarca cantos a capella, toques procesionales y diversos golpes de tambor. En los estados Aragua, Carabobo y Yaracuy se entonan estos cantos a capella que denominan localmente Sirenas, cuartetos octosílabos alternados entre varios solistas, además de un toque procesional que lleva por nombre Sangueo.
Los tambores en honor a San Juan son música de golpe, acompañados de ritmo y baile, el canto expresa la devoción al santo, las letras varían y generalmente son improvisaciones que evocan la vida, la esperanza y el amor concluyo diciendo la embajadora Pugh Moreno, frente al altar de San Juan Bautista.
Embajada de Venezuela en Vietnam