Discurso del canciller Jorge Arreaza en Reunión de Alto Nivel de la ONU por el Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares - MPPRE

Discurso del canciller Jorge Arreaza en Reunión de Alto Nivel de la ONU por el Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares

Quisiera, en primer lugar, manifestar que la República Bolivariana de Venezuela hace suya la declaración del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) y aprovecho la oportunidad para reiterar la posición nacional de principios del Gobierno Bolivariano en relación con la necesidad de eliminar completamente las armas nucleares, como base de nuestra Diplomacia de Paz, y el compromiso firme en la promoción y consolidación de un mundo más seguro y de paz.

El logro de ese objetivo depende de la voluntad política unánime de todos los Estados, pero muy especialmente de los Estados poseedores de armas nucleares, a quienes corresponde adoptar, sin demora, medidas eficaces encaminadas al desarme general, completo y no discriminatorio, sin dobles raseros.

Venezuela siempre ha condenado la producción, el almacenamiento, el uso y la amenaza de uso de las armas de destrucción masiva, incluyendo, por supuesto, las armas nucleares. La única garantía contra el uso de armas nucleares es definitivamente su total eliminación.

Hacemos un llamado por el cese inmediato de los planes para la modernización, perfeccionamiento cualitativo, desarrollo, la producción y el almacenamiento de cabezas nucleares y sus sistemas vectores.

Expresamos nuestra profunda preocupación ante las perspectivas de una nueva carrera armamentista nuclear, incluyendo el uso del espacio exterior para su despliegue, como evidencia la derogación de aquellos tratados internacionales mutuamente convenidos para limitar y reducir dicho armamento entre los principales Estados poseedores de estas armas. El derrumbe de esos acuerdos y el aumento del gasto nuclear demuestran el retroceso inadmisible que viene operando en esta materia. Tales despliegues evidencian que estamos lejos de la «paz y seguridad» que en teoría esas armas deberían proporcionar.

Asimismo, queremos dejar muy claro que las doctrinas estratégicas y las políticas de seguridad basadas en la posesión de tales armas como instrumentos de disuasión, desoyen el clamor de los pueblos del mundo por la eliminación total de esas perversas armas, dada su naturaleza inmensamente destructible y las catastróficas consecuencias que generan, que evidencian que lamentablemente los intereses de un muy reducido grupo de Estados han prevalecido sobre los intereses de la humanidad.

Sabemos que Estados Unidos utiliza todos los medios a su alcance para tratar de intervenir en los asuntos internos de los países y afectar de manera continuada la paz interna y la paz internacional. El multilateralismo y la Diplomacia de Paz deben impedir que las ambiciones guerreristas y supremacistas de Washington pongan en riesgo la vida en nuestro planeta ¡No más armas nucleares! ¡No más armas de destrucción masiva! Actuemos con firmeza por la humanidad.

Reiteramos nuestro compromiso de paz y democracia como único medio de solución de nuestras diferencias. Recordamos que la CELAC, la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe, declaró a nuestra región como Zona de Paz.

Nuevamente, apelamos a que no se utilicen las doctrinas de seguridad en contra de la libertad de los pueblos libres del mundo.

Muchas gracias.