El presidente de la República, Nicolás Maduro y el ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza, participaron este viernes en el Seminario Internacional «A 50 años de la victoria de la Unidad Popular», en el que reivindicaron la trascendencia histórica del triunfo democrático de Salvador Allende en Chile, el 4 de septiembre de 1970, y la vigencia de su legado en momentos en que Venezuela y otros países son sujetos de agresiones imperiales por construir con el pueblo proyectos socialistas.
El jefe de Estado venezolano, tras extender un saludo amoroso y fraternal al pueblo chileno, expresó que hablar del presidente mártir, Salvador Allende, es «hablar de una de las historias más hermosas de un líder en su lucha por el pueblo. La valentía, la entereza, la autenticidad por ser leal a sus principios, a sus ideas, a su pueblo humilde y trabajador».
Definió como un «despertar allendista» las manifestaciones de calle que el pueblo chileno protagoniza desde septiembre de 2019, en demanda de un proceso constituyente que acabe con las desigualdades sociales existentes.
«Allende vive en nuestra lucha, en nuestras batallas y en nuestras victorias», manifestó el presidente Maduro en su breve intervención.
Por su parte, el canciller Arreaza comparó la estrategia imperial que aplicaron al gobierno de la Unidad Popular, antes y después del triunfo de Allende y su mandato de tres años, con la que imponen a Cuba desde antes del caso chileno; a Nicaragua después y a Venezuela hoy en día. «Es el mismo formato, el mismo patrón económico», afirmó.
Comentó que Venezuela lleva a los funcionarios del Gobierno de los Estados Unidos ante la Corte Penal Internacional, porque considera que los efectos de las medidas coercitivas unilaterales, que también aplican en Cuba, Irán y Mozambique, entre otros, y aplicaron a la gestión de Allende, representan crímenes de lesa humanidad.
En este sentido, citó el libro «El Arte de las Sanciones», de Richard Nephew, ex asesor del presidente Barack Obama, quien expone en su obra que el objetivo de la política estadounidense de bloqueos y sanciones «es causar dolor en el pueblo» objeto de las medidas e identificar las vulnerabilidades de esas sociedades agredidas para acentuar en estas debilidades su imposición de dolor y, por último, ofrecer una negociación, que sería la capitulación o rendición del país sancionado.
El Ministro también mencionó el libro «Salvador Allende. Una época en blanco y negro», de la autora Alejandra Rojas, en el que aparece una cita del entonces embajador estadounidense en Santiago, Edward Korry, quien tras el triunfo de la Unidad Popular advierte a Eduardo Frei, presidente saliente: «No permitiremos que llegue a Chile un tornillo ni una tuerca bajo Allende. En cuanto Allende asuma el poder, haremos todo cuanto esté en nuestras manos para condenar a Chile y a los chilenos a las mayores privaciones y miseria».
El diplomático venezolano recalcó que «así como Allende no se rindió y ofreció su vida, tampoco nosotros en Venezuela ni en Cuba lo haremos jamás».
La actividad telemática, que se extenderá hasta este sábado, 5 de septiembre, es organizada por el Partido Comunista de Chile y otras organizaciones políticas, sociales y sindicales, e instituciones académicas del país austral y de otros de la región.