En el acto cívico-militar celebrado en el Consulado General de la República Bolivariana de Venezuela en Barcelona, España, participaron el cónsul General Ricardo Capella y demás diplomáticos y trabajadores y trabajadoras de la sede consular; el cónsul General de Cuba en Barcelona, Alain González acompañado por la cónsul cubana Lismara Castro.
Después de haber entonado el Himno Nacional de Venezuela, interpretado por el comandante y líder de la Revolución Bolivariana Hugo Chávez, el cónsul Capella tomó la palabra para explicar la vigencia y la importancia de aquel 5 de julio de 1811 en los tiempos actuales, para Venezuela, América Latina y el mundo.
“Durante siglos América Latina fue juego de otros, territorio de conquista y explotación” recordó Capella. “Ahora, gracias a la acción valiente de nuestros próceres que hoy celebramos, es ejemplo de lucha revendicadora, emancipadora, revolucionaria y libertaria. Somos fuente de inspiración para todo el mundo porque el sueño de esos próceres, el sueño de Miranda, el sueño de Bolivar, el sueño de Chávez, sigue vivo” aseveró.
El diplomático subrayó como la Revolución Bolivariana es heredera de la gesta del 5 de julio de 1811 y representa “el accionar necesario contra la guerra multiforme que enfrenta el país, las sanciones y la desestabilización” promovidas desde el imperio y sus lacayos, dentro y fuera de nuestras fronteras.
“Mientras Bolívar luchaba por nuestra libertad, otros mancillaban nuestro honor y fustigaban su acción libertadora poniéndose al lado de la corona española”, recordó Capella.
“Hoy ocurre casi lo mismo: seguimos en batalla por la independencia definitiva e integral, por la soberanía y la paz, mientras otros pretenden entregar nuestro territorio y nuestros recursos”, dijo refiriéndose al intento de robo de Citgo y del oro venezolano depositado en el Banco de Inglaterra, a la disputa por el Esequibo, a la batalla contra las sanciones criminales que “afectan a todo nuestro pueblo golpeando su calidad de vida, sus derechos humanos, el acceso a la salud y a la alimentación”, entre otras.
El diplomático afirmó que Venezuela siempre estará dispuesta y abierta al diálogo, a nivel nacional e internacional. Sin embargo, no dejará de enfrentarse a la injerencia y a quienes amenazan su soberanía y la paz de su pueblo.
Finalmente, agradeció la presencia del Cónsul de Cuba, “hermana república con la que compartimos un pasado y un presente de valentía y de lucha”, así como de quienes se solidarizan con Venezuela desde Barcelona, desde Cataluña y desde todo el territorio español.
“Sepan que en Cuba tienen un pueblo hermano decidido a compartir los destinos de libertad y soberanía, a combatir por las causas justas”, respondió el cónsul cubano Alain González. “Acabo de regresar de Andorra, donde me reuní con unos médicos cubanos estaban luchando contra el Covid-19. Sepan que más del 70 por ciento de ellos habían estado en Venezuela trabajando en los CDI (…) Nos unen lazos de hermandad y solidaridad que van más allá de las fronteras”.
Durante el acto, el cónsul de Venezuela en Barcelona, Lenin Ernesto Serrano Blanco, recibió el Botón de Honor al Mérito del Consulado General.
Sobre el 5 de Julio
La del 5 de julio de 1811 fue una gesta histórica que abrió el camino a la libertad de Venezuela y a la integración de Nuestra América, por la que lucharon Miranda, Bolívar y el mismo Hugo Chávez. Ese día, el Congreso General de Venezuela, que se había instalado en marzo con el objetivo de redactar una nueva Constitución, llegó a la conclusión de la necesidad de declararse libre, de declarar formalmente su independencia de la Corona de España. Así que a las 2:30 de la tarde, Juan Antonio Rodríguez, presidente del Congreso, anunció la independencia absoluta del país, un acto civil de rebeldía ante un poder ilegítimo. “Declaro solemnemente la independencia de Venezuela. Esto nos saca de la esclavitud en la que hemos permanecido hasta ahora” dijo.
En el texto que se debatió ese día, y que será aprobado y suscrito dos días más tarde, se habla de “la necesidad de recobrar la dignidad natural”, y se afirma que “como todos los pueblos del mundo, estamos libres y autorizados para no depender de otra autoridad que la nuestra”. Quedaron establecidos los principios de igualdad de los venezolanos, la abolición de la censura y la libertad de expresión.
Con este acontecimiento, Venezuela se convirtió en el primer país de Hispanoamérica y el 3ro de América que declaró su independencia, después de Estados Unidos (1776) y Haití (1804).
Consulado de Venezuela en Barcelona