Realizan en La Habana conferencia sobre Aspectos Fundamentales del Sistema Judicial Venezolano - MPPRE

Realizan en La Habana conferencia sobre Aspectos Fundamentales del Sistema Judicial Venezolano

“Para nosotros asumir la gestión judicial es un compromiso de Patria; una responsabilidad que trasciende las puertas de nuestra institución; es permitir el acceso a todos los sectores sin discriminación alguna, creando fórmulas accesibles de administración y justicia”. Así lo afirmó la primera Vicepresidenta del Tribunal Supremo de Justicia venezolano,  TSJ, Indira Alfonzo, durante la conferencia “Aspectos Fundamentales del Sistema Judicial Venezolano”, realizada en el IX Encuentro Internacional de Justicia y Derecho, que se celebra en el Palacio de las Convenciones de La Habana desde hoy y hasta el 25 de mayo. La magistrada informó que el presidente del TSJ, Maikel Moreno, no pudo asistir al encuentro debido a sus responsabilidades constitucionales, “en este momento histórico trascendental en nuestro país, donde a través del mecanismo del sufragio expresado el pasado 20 de mayo, ha triunfado la paz, se ha expresado el pueblo”. Como preámbulo a la conferencia, Alfonzo rememoró que en el año 1999 por iniciativa del comandante Hugo Chávez surgió en Venezuela un proceso constituyente que consultó a todos los sectores del país, y fue allí donde “el pueblo conoció el poder de la transformación democrática, y se forjó la base legal de la nueva República Bolivariana de Venezuela”. A partir de allí, explicó, se suman a los poderes Legislativo, Ejecutivo, Judicial, el Poder Ciudadano y el Moral. En Venezuela, la potestad de administrar justicia emana de los ciudadanos, por ello el poder Judicial goza de independencia y autonomía funcional, financiera y administrativa. Indicó que el TSJ es el principal ente administrador de justicia y que para ello cuenta con siete salas: Constitucional, Penal, Civil, Social, Político – Administrativo, Electoral y la Sala Plena, donde coinciden los 32 magistrados y magistradas. Dentro de la estructura política y social contemplada en la Carta Magna venezolana se establecen mecanismos de control institucional que solo pueden ser ejercidos por el máximo tribunal del país, de tal manera que la sala constitucional ejerce el control sobre la constitucionalidad. Uno de los cambios más significativos dentro del ente judicial es la incorporación de una instancia especial y multifuncional que unifica criterios y doctrinas sobre la constitución. Agregó que en su nación ha iniciado un proceso de revisión profunda de las leyes, “porque tenemos que adecuarlas a esos procesos sociales que a veces van mucho más rápido, para acercarnos cada día más a la ciudadanía”. En ese sentido, dijo que han surgido proyectos como el de “Municipalización de la Justicia”, para atender los problemas judiciales que afectan a la comunidad,  creando tribunales especiales, programa que ha tenido un impacto positivo debido a la reducción de infracciones y delitos. Destacó que el TSJ  ha creado además normas expresas como la elaboración del código de ética del juez venezolano; el reconocimiento del tribunal disciplinario, pioneros en Latinoamérica; la creación de una coordinación nacional de justicia de paz y el reglamento de la comisión especial de justicia de paz como forma de justicia alternativa; entre otros. Uno de los principales retos es la adecuación tecnológica y la sistematización informática de los procesos, que permitan llevar de manera más eficiente las carga de causas que se manejan, igualmente fortaleciendo la comunicación interna de los integrantes del TSJ con los ciudadanos y ciudadanas. Denunciar ataques infundados contra magistrados En el coloquio, la Magistrada llamó la atención sobre los ataques infundados de los que muchas veces son víctimas los jueces no solo en Venezuela, sino en otras naciones con los que “pretenden incidir en nuestra conducta, en nuestra decisión y en nuestro modo de proceder al momento de resolver una causa y que no corresponden a debates sobre los criterios jurídicos que hemos esgrimido sobre una decisión, por el contrario: se basan en la desinformación, en la manipulación de la verdad o con el fin de crear una matriz de opinión desfavorable, y de esta manera violentar o pretender flaquear la majestad que demanda el ser juez o jueza”. Denunció que la magistratura venezolana considera que esta forma de intervención debe ser  cuestionada por las altas autoridades judiciales “de nuestros Estados; así lo hemos hecho en nuestro país, ya que es una muestra de verdadero reconocimiento a la autoridad judicial. Debemos protestar, ser suficientemente constantes y firmes de no dejarnos vulnerar por esta práctica de los últimos tiempos que pretende doblegar la integridad del juez o la jueza”. Embajada